Registro
semanal de práctica
Día
1: 11 de mayo
Hoy
al llegar al salón la maestra me presentó al grupo y de inmediato se continuó
realizando una actividad en el área de matemática que venían resolviendo en
días anteriores. Los niños debían resolver ecuaciones con diferente
denominador, y luego de que copió los ejercicios en la pizarra, los niños
procedieron a resolverlas. En esta actividad pasé la asistencia de los niños
para ver quienes estaban presentes, asesorado por la profesora, al final de la
clase recogí los cuadernos de los niños para dárselos a la maestra, ya que ella
los revisaría en el próximo bloque. Al resolver las ecuaciones, los niños
estaban muy confundidos, aunque las niñas terminaron la actividad de manera
rápida y sin mayores inconvenientes, pero al acercarme a los varones tenían
dudas de cómo realizar los ejercicios, de hecho los pocos que los resolvieron
no lo hicieron de manera correcta.
Después
del receso, los niños se dividieron en dos grupos, uno se iría a informática y
el otro se quedaría en la clase de inglés, para estar en ambos ambientes fui
primero a informática, pues en ese grupo están los niños más distraídos y me
pareció interesante ver su comportamiento en esa clase. Pude observar que los
niños disfrutan la clase de informática, pues les gusta estar frente a las
computadoras y su comportamiento es mucho mejor que en la clase en el salón
donde hablan constantemente y se levantan de sus asientos. Aclaré las dudas de
los niños mientras realizaban una actividad creativa en las computadoras.
Al
ir con los niños a la clase de inglés, pude notar que la profesora no tiene
dominio del grupo, pues los niños ni siquiera la escuchaban, la falla principal
de la maestra es que les promete dar cinco mil positivos si realizan bien la
actividad o si tan solo se quedan en su lugar sentados, lo que despierta el
desinterés de los niños. En esta clase también recogí una actividad que
realizaron los niños en hojas para dárselas a la maestra.
Después
de inglés los niños tuvieron clase de danza, el profesor los buscó y se fueron
al patio central para ensayar un baile para la semana aniversaria del colegio, donde
pude notar que el profesor dejaba de lado a los niños que tenían dificultades
para bailar, y solo tomaba en cuenta a los alumnos que más bailan dentro del
grupo.
Esta
experiencia me sirvió para conocer al grupo de niños y a los docentes que los
rodean, pude notar que los niños la mayoría de las veces aprovechan la
distracción del docente para ellos hacer cualquier otra actividad durante la
clase o hablar con sus compañeros. Aprendí que a los niños hay que prestarles
atención en todo momento, de lo contrario pueden aislarse del grupo, como
sucedió con varios niños a lo largo de esta jornada.